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El llamado

Publicado el , 12 de Ene de 2013
Me encuentro persiguiendo,
con la magia entre las sábanas,
una llama vieja, un verso extraño...

Cabello recogido, vino en mano,
mis caminos son lascivos, mis oleajes nublados,
los espacios llueven mitos,
mis palabras muchos años.

Me recorro en el silencio,
con tus letras como manto,
nuestros cuerpos son mis trazos.

De selva y desvelada,
lobezna, aullante y embriagada,
no dejo de llamarte,
no pretendo controlarme.

Estás y te encontré... Me desnudaste,
Me has descubierto entre los mimos
y he sabido distinguirte, saborearte.

Ahora que nos sé todo me arde,
Me hallo salada y cautiva,
Mis piernas son un mar de olas furtivas,
Es el deseo de la lengua y el pensamiento.

Nadie piensa en ti, en los cuadros que yo lo hago.

Es una cosa de de locos,
mis letras y mis ganas,
es una cuna de locos,
tu cuerpo y mis océanos...

Tú me sabes a nosotros, ésta copa a nuestro llano.
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Sobre el autor

Mariana Taboada

Mujer de selva-pasos-largos-roja que escribe por mantener su lazo sueños-tierra-vida.



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No soy yo

Decía que no, que no lo extraño Decía que se marchó y que con los días se enfriaba el abrazo, en realidad, la musa aquí no sabe lo que dice, está hecha al fuego y se quema. No soy yo ya la que te extraña, son mis cuentos, mis alas, mis ganas. ...

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